Reseña de Avengers: Infinity War

Director: Anthony Russo y Joe Russo

Actores: Josh Brolin, Robert Downey Jr., Benedict Cumberbatch, Chris Hemsworth,
Mark Ruffalo, Tom Holland, Scarlett Johansson

Duración: 148 minutos

País: Estados Unidos

Año: 2018

Tal parece que a los adolescentes y/o a los jóvenes adoradores de los cómics cuando asisten a un nuevo filme del género les gustan los números: 10 años y 18 películas para llegar a este momento, decenas de superhéroes en pantalla + miles de soldados dirigidos por un grandote preocupado por la sobrepoblación del universo + 6 gemas del infinito + 1 guante de poder + inumerables muertos y miles de millones de dólares de ganancia. Ante esas cifras ¿hemos hecho preguntas? En todo caso, ¿cuáles son esas preguntas? A mí se me ocurren: ¿Para qué? y ¿Qué es (y/o ha sido) mejor, una historia con un protagonista o con varios?

El villano del cuento nos ayuda a encontrar una posible respuesta. Antes, hay que decir cómo se llega ahí. Thanos, la amenaza más amenazante entre las amenazas, una mole morada de prominente quijada, busca reunir seis gemas de poder que le darán aún más poder. Su objetivo es, extrañamente, matar a la mitad de la población del universo porque según él, son muchos habitantes y los recursos son limitados. Esta más bien parece una excusa barata de los escritores para tratar de darle cierta profundidad a sus acciones y no presentarlo como un simple genocida, pero en fin. Dejemos pasar eso. Ya tiene en su poder una piedrita, así que irá en la búsqueda de otras cinco. A grandes rasgos de eso trata el relato y sobre las consecuencias de si obtiene lo que ansía. ¿Es un malote efectivo? Yo diría que seeeeeee... No obstante, no es el mejor. Pesa sobre él que es una imagen de computadora y no un ser actuado por un ser humano, además de las ya comentadas pobres honduras en sus decisiones.

Me sorprende que la historia se pueda resumir a grandes rasgos así pero sí, se puede, ¿por qué? Porque nuevamente el atractivo de esta franquicia recae en los personajes, no en la trama. No en una visión de director ni en alguna reflexión intelectual. No en mostrar belleza (jajaja ¡claro que no!) o en desarrollar una idea. Lo que se vende es ver a prácticamente todos los héroes ya presentados hasta ahora. Números. Se vende al mayor número de héroes en pantalla jamás visto. Si usted es fanático de ellos probablemente con eso sea suficiente. A notar que la película carga y asume que a usted le han gustado las anteriores, por lo tanto, no presenta a ningún personaje, simplemente ya están ahí y el trabajo de ellos se resume en pelear, decir chistes o conocerse entre ellos. No hay desarrollo pues, de casi ninguna de estas personalidades, siendo pequeñas excepciones Hulk, al mostrar miedo, Gamora, por su importancia en el desarrollo de la historia y el mismo Thanos, de quien podría decirse que es el verdadero protagonista. Honestamente pensé que tantos personajes se estorbarían entre ellos. No es el caso. Hay que reconocer que el guión reparte muy bien los minutos entre ellos y que algunas interacciones resultan muy amenas. Thor junto a los Guardianes de la Galaxia y Iron-Man junto a Doctor Strange me parecieron muy buenas. Otra cosa muy agradable de ver fueron algunas peleas. Pienso que la del malo contra el señor Stark y sus aliados está como una de las mejores entre las que ha hecho esta casa productora.

Es el atractivo de ver a tantos personajes un peso del que jamás se puede deshacer. Me refiero a que se nota inmediatamente la diferencia de cuando una película tiene menos personalidades. En ellas hay espacio para hacer más. Para desarrollar más. Menos es más. Aquí, aunque está bien hecha y puede entretener, no busca hacer otra cosa porque entonces sería una obra de más de cuatro horas. Un filme menos plagado de estrellas puede aspirar a ser más libre. Este no. Los directores y guionistas son meros artífices de una visión controlada en el guantelete de poder de los productores. Probablemente eso no importa porque cumple con el objetivo de contar una historia con las estrellas que ha creado y contratado y eso en gran parte resulta divertido.

Ahora, las obras anteriormente hechas también pesan. Ya dije que esta obra asume que a usted, fanático de los cómics, le han gustado los anteriores filmes. Bueno, habrá personas como yo, que no hemos disfrutado de varias cosas que ya nos han presentado y que no creemos que todo lo que han hecho sea bueno. Por ejemplo, siguen con la maldita necedad de poner a decir chistes a cualquier personaje en cualquier momento. Que la mitad de la población del universo se va a morir ¡No importa! Hagamos como si nada y pongamos algún chistorete. Drax francamente es un idiota odioso. El tono hecho para niños y adolescentes es aún mayor aquí. Este matiz de nunca dejar algo de seriedad afectará al final. Primero, quiero destacar otro aspecto que los anteriores largometrajes han dejado claro y que es lo que me parece más daña. Eso es, que no hay un verdadero peligro, amenaza, violencia o consecuencias funestas. Loki ya murió y regresó, War Machine sobrevivió a una caída de cientos de metros que mataría a cualquier otro, Groot retoñó desde la aniquilación, etcétera, etcétera. Vaya, incluso un enemigo que se supone que ya había muerto regresa en esta película.

Estos puntos son los que quería recordar antes de llegar al final que nos presenta el filme. Atención en el extraño caso de que usted aún no sepa lo que pasa. Sucede que después de todo, Thanos sí consigue juntar todas las gemas, chasquea los dedos y entonces adiós a la mitad de los seres vivos inteligentes del universo. El malo consigue lo que quiere y se acaba la película. Se supone que debo conmoverme por ver como varios héroes mueren. ¿Por qué debo hacer eso? Las películas anteriores han hecho que no les crea. Sencillamente es claro que la mayoría va a regresar, que es un truco barato y que los realizadores mintieron cuando dijeron que esta película de Avengers ya no se dividiría en dos mitades. Esta fue la primera de ellas disfrazada y los 10 años y 18 películas para llegar a este momento, decenas de superhéroes en pantalla + miles de soldados dirigidos por un grandote preocupado por la sobrepoblación del universo + 6 gemas del infinito + 1 guante de poder + inumerables muertos y miles de millones de dólares de ganancia fueron para que yo regrese a la sala de cine a ver la segunda parte de esto. Dinero. La respuesta a mi pregunta inicial: ¿Para qué? Es: Dinero. Cuando eso es tan evidente y no es acompañado por algo más (por lo menos de un deleite artístico), tan rápido como el chasquido de unos dedos, todo lo épico y heroico que se presenta se desmorona en motas de polvo al viento.

5.5/10

Reseña de Un Lugar en Silencio (A Quiet Place)

Director: John Krasinski

Actores: Emily Blunt, John Krasinski, Millicent Simmonds, Noah Jupe

Duración: 90 minutos

País: Estados Unidos

Año: 2018

Es el sonido. Es la forma en que se usa, o no, en esta película. De forma genial, el segundo sentido más importante para experimentar el cine se convierte en el primero en una obra que no goza de un masivo presupuesto pero que, al mezclar de gran forma la ciencia ficción con el terror recuerda lo innecesario de cientos de millones de dólares para entretener y asustar. Además de que realza el trabajo de un buen director, de la edición y de los actores.

John Krasinski dirige, comparte créditos de escritor y estelariza junto a su esposa en la vida real, Emily Blunt, una historia que parte de la premiza de que cualquier humano que haga un ruido mayor a un pequeño susurro acabará muerto, esto debido a que criaturas alienígenas indestructubles cazan a los humanos usando un super desarrollado sentido del oído (mmm, ¿una posible parodia usaría el sentido del olfato?). Ese punto de partida es muy inteligente y se usa de gran forma. Lo que ocurre es que inmediatamente se crea tensión en el filme. ¡La espectativa es que haya silencio! (una ironía cuando se descubre que el largometraje lo produjo en parte el rey de las explosiones hollywoodescas: Michael Bay). Creo que ese sensación incluso se traslapa a la sala de cine. Oír que alguien toma refresco, tose o come palomitas se amplifica e influye en esa extraña expectativa de exigir sigilo. ¡Cállense o vendrán!

A esa sólida base para el suspenso se le agregan más detalles para una construir una gran obra. La historia gira alrededor de la necesidad de un padre y una madre de proteger a sus tres jóvenes hijos. "¿Qué son si no pueden protegerlos?" se pregunta uno de los progenitores en un momento. De tal modo que los niños se sienten desprotegidos y asustados y los padres preocupados por el futuro. Sentimientos cercanos que ayudan a crear empatía con los personajes. ¡Ah, sí! Hay que agregar que a los esposos se les ocurrió que sería una buena idea tener a un bebé en un mundo lleno de asesinos de ruidozos (es una gran idea para aumentar el drama, eso sí).

Está la receta puesta para un memorable y delicioso platillo audiovisual. Se trata de la secuencia que inicia cuando a la embarazada le llega el momento de concebir. Excelentes minutos de arte cinematográfico. Casi sin diálogos, con el ritmo, la música, la atmósfera y los movimientos y encuadres de cámara propios de un realizador de calidad. A la mujer se le rompe la fuente. Hace un poco de ruido y atrae a un monstruo asesino. Busca un escondite pero el bebé empieza a salir. ¡Ella aguanta el dolor y las ganas de gritar! (Blunt da una gran actuación ahí y en toda la película). El engendro ya casi la encuentra. ¿Se salva? Descúbranlo ustedes mismos. Son este tipo de momentos los que muchas veces no encontramos en superproducciones ruidosas llenas de efectos especiales. Aquí se genera tensión, expectativa y emoción. Aquí hay más calidad. Además, no es la única parte así. Hay otra en un sótano inundado también muy buena y hay una bella escena donde el poder de una hermosa canción es un oasis en un terrible mundo sin música. Gran trabajo de Krasinski en la dirección y de Christopher Tellefsen en la edición. A notar que el largometraje solamente dura noventa minutos, de modo que los realizadores logran un relato con muchos miedos y fuerza concentrada. No tengo mayor queja con esta película, aún así no puedo decir que sea excelsa. Trabajos con esa cualidad van más allá de lo que vi, sentí o extrapolé de aquí.

Es curioso que una película que costó alrededor de 21 millones de dólares (una ganga para lo usado en Hollywood) sea más cautivadora, mejor realizada e incluso más bella visualmente que lo que muchas veces nos da el verano cinematográfico (vaya que no creo que el de este 2018 tenga algo sobresaliente). Vengan un poco más cerca, escuchen lo que tengo que decir: Véanla.

9.0/10